¿Cuándo y cómo empezó ese gusto por las letras, por la poesía?

 

Realmente más que un descubrimiento en las letras primero fue un descubrimiento por un movimiento, estaba en teatro y comencé a descubrir ciertas cosas, ciertos escritos que hablaban más que nada del movimiento, de ese tipo de cosas que se involucran exclusivamente en el teatro, pero que se habla en otros aspecto, en este caso conocí la literatura y comencé a ver lo que hay a indagar. Tratas de experimentar, de comenzar a ver que puedes lograr con estas cosas que has encontrado, entonces en esta parte muy experimental  muy lúdica.  Se empieza de esa forma casi como la mayoría de cosas.

 

Hablando de esta experimentación ¿Cuéntanos sobre tus escritos que es lo que has hecho? 

 

Por lo general, lo que hago no es poesía ¡cachas!; así que todos dicen que lo que hago poesía.

 

¿Tienes algún blog o lugar en el que publiques?

 

No, no público… me he abierto un poco y  he mostrado algo de lo que he hecho, pero solo tal vez por alguna presentación estrictamente académica, más que por un gusto personal.

No considero que yo hago poesía, porque tal vez es una construcción muy abstracta si se podría llamarle así, desordenada también; pero de a poco se va descubriendo que  en esas carencias de sentido aparentes se involucran tal vez situaciones más profundas o situaciones externas que afectan, es por esto, creo yo que ahí cada persona lo asocia a diferentes situaciones de sus vivencias ¡y ya pues! lo consideran una construcción poética llamativa, agradable y muy cargada de situaciones.

 

¿Has tenido la oportunidad de presentarte fuera, cuéntanos más sobre eso?

 

No sé, surgió esta cosa de hablar con estos manes de la receta… hace unos días hubo un concurso, un slam de poesía entonces… más que nada fue  una especie de teatralización del escrito , siempre en este bar te dan apertura para cosas nuevas, tanto  para música, fotografía, pintura entonces así surgió

En la búsqueda de espacios se trata también de no ver de un público para estas cosas, sino que más bien sea  simplemente una liberación de una carga o sea porque es como que todo eso se encierra y después dices, ¡ya pues que chuchas!  ¿Qué hago con esto? si la destrucción no me lleva a ningún otro estado, entonces que la escucha, llegue y haga algo.

 

¿Y ahora después de esta experimentación con varios escritos, has pensado en algún proyecto futuro con relación a la  escritura?

 

Si, o sea se supone que el objetivo ahorita, llamémoslo objetivo sería mandar un trabajo al concurso “El desembargo poético” que busca poemas o construcciones poéticas inéditas, entonces ¡ya pues! y la de “Se busca poeta” es igual para ver qué hay de nuevo .Para que los autores que nunca han publicado, traten o se incentiven para hacerlo.

En el  “Desembarque poético” el premio es la publicación de un tiraje de 1000 libros, en el que 200 te dan a voz y los otros 800 se quedan ellos. Y ¡ya pues! es como que generar un  libro de a gratis, entonces el asunto ahora es trabajar en una extensión y construcción, para pulir toda esa porquería.

 

¿Qué te trajo a la U-artes?

 

¿A la U-Artes? lo que me trajo principalmente a la Universidad es el hecho de largarme, de huir, bueno no de huir, de buscar nuevas cosas, experiencias y situaciones. Tratar de llegar a un norte, que no es un norte, sino es un sur. Entonces en esta búsqueda de suposiciones, en esta idea de siempre irse más lejos, cada vez más lejos y más lejos, llegue.

  ¡Ya pues! yo soy de Tulcán, no específicamente de Tulcán, también he estado en Ibarra, luego en Quito  buscando una carrera que me agrade, ¡que chuchas  hago acá¡ o ¡debo  irme! ¡Ya pues! no pertenezco a ningún lado en realidad en esa constante búsqueda de algo, caí aquí, abrieron la universidad era como que la catapulta para largarse y ¡ya! entonces eso, salí a buscar más puertas por abrir y seguir buscando cosas que me maten.